¿Cómo se solicita la jubilación?
No hay norma general que establezca cuándo una persona puede jubilarse. Al contrario, para saber si su solicitud es viable, nuestros abogados expertos en Seguridad Social han de examinar detalladamente la situación específica del trabajador en cuestión.
Asimismo, conviene que su abogado sepa recomendarle la mejor y más rentable opción, dadas sus circunstancias. Si hablamos, en concreto, de la jubilación ordinaria, es necesario cumplir con estos requisitos para poder solicitarla con éxito:
- Haber cumplido la edad ordinaria de jubilación, es decir, los 67 años o 65 años cuando se acrediten 38 años y 6 meses de cotización.
- Tener cotizados, como mínimo, 15 años.
- Que, al menos, dos de esos años se encuentren entre los últimos 15.
Si el trabajador cumple estos requisitos, nuestros juristas se encargarán de presentar la correspondiente solicitud en el organismo competente, dentro de los plazos establecidos. Esto es, entre tres meses antes y tres meses después del cumplimiento de la edad de jubilación o del fin de la actividad laboral.
Si está en una situación de Incapacidad Laboral Permanente, consulte con nuestros abogados expertos en incapacidades, le informaremos sobre la mejor opción para su jubilación.
¿Qué es la jubilación anticipada?
Hasta aquí los detalles y las condiciones de la jubilación ordinaria. Pero ¿qué ocurre cuando un trabajador tiene que jubilarse, por distintas causas, antes de la edad establecida? Para esos casos se reserva la jubilación anticipada, que presenta modalidades bien distintas:
La jubilación anticipada por discapacidad
Es uno de los beneficios de tener el certificado de discapacidad y está destinada a aquellas personas que, por su condición física, se entiende que realizan un sobreesfuerzo superior al resto al desempeñar su trabajo. Por eso, se permite la jubilación anticipada en los siguientes casos:
- Un 45 % de discapacidad o más: si tiene cotizados, por lo menos, 15 años, el trabajador en esta situación puede acceder a la jubilación anticipada por discapacidad desde los 56 años.
- Un 65 % de discapacidad o más: en este caso, la edad de jubilación se puede adelantar a los 52 años.
- Una enfermedad crónica: hay patologías graves y severas que impiden al trabajador desempeñar su labor, como por ejemplo una discapacidad intelectual o una enfermedad mental.
Solicitar la jubilación anticipada por discapacidad en cualquiera de estos casos conlleva, normalmente, un proceso largo y complejo. Por eso, y por la complicada situación en la que suele encontrarse el trabajador que necesita solicitar la jubilación anticipada por discapacidad, el apoyo de los abogados especializados en discapacidad se hace tan importante.
Si aún no tiene grado de discapacidad reconocido, nuestro Despacho se puede encargar de solicitar el certificado de discapacidad, que en ocasiones es difícil de conseguir sin la ayuda de un abogado.
La jubilación anticipada por trabajo penoso
Existen ciertos trabajos que, por sus condiciones y naturaleza, pueden llegar a suponer un riesgo para quien los desempeña. Es el caso, por ejemplo, de mineros, bomberos, policías locales o trabajadores ferroviarios.
A todos ellos, si desean acceder a la jubilación anticipada por trabajo penoso, se les aplica un coeficiente reductor, según el cual el importe de la jubilación se reduce proporcionalmente a la edad en la que deciden jubilarse anticipadamente.
La jubilación anticipada forzosa
Esta modalidad de jubilación anticipada se da cuando la jubilación no es decisión del trabajador, sino que se debe a causas ajenas a su voluntad. Lo más común es que se llegue a este punto por un despido, tras el cual el empleado se encuentra, por su edad o por cualquier otro motivo, con muchas dificultades para encontrar un nuevo puesto de trabajo.
También aquí se aplican coeficientes reductores en función del tiempo que el trabajador ha cotizado a lo largo de su vida laboral.
La jubilación anticipada voluntaria
Muchas personas entienden que les merece la pena jubilarse antes de tiempo, a pesar de que, a cambio, cobrarán un importe menor en concepto de pensión. Esta decisión se debe, generalmente, a motivos personales o económicos.
¿Cuáles son las diferencias entre jubilación anticipada y prejubilación?
Si se está plantando una jubilación, es muy importante que sus abogados para jubilación sepan explicarle claramente las diferencias que existen entre cada clase de jubilación. En este sentido, hay que saber diferenciar bien entre jubilación anticipada y prejubilación.
Esta última figura, a diferencia de la jubilación anticipada, nace del acuerdo explícito entre el empleado y la empresa. Es decir, ambos acuerdan dar por terminada la relación laboral con unas determinadas condiciones, que deberán ser asumidas en todo caso por la empresa.
Normalmente, acceden a la prejubilación personas que están más o menos cerca de la edad de jubilación. De su mensualidad no se ocupa la Seguridad Social, por tanto, hasta que llegan a esa edad y se jubilan de manera oficial.
La jubilación por sectores: Otras regulaciones
Hasta aquí hemos visto los casos más generales de jubilación, pero nuestros letrados especializados en jubilación también gestionan casos más concretos. Entre otros, tramitan la jubilación de aquellos trabajadores que se enmarcan en alguno de estos sectores:
- Trabajadores autónomos.
- Funcionarios públicos.
- Trabajadores del clero.
- Marineros.
- Artistas.
Se trata de sectores que cuentan con su propia regulación en lo que respecta a la edad y el importe de la jubilación.
Si quiere estar seguro de que se jubila con la edad y con la pensión de jubilación más beneficiosa para usted, acuda a especialistas.
En nuestro despacho contamos con abogados expertos en jubilación que resolverán todas sus dudas.